Los ojos son una de las partes de nuestro rostro que más delatan la edad, manifestándose en signos típicos como las patas de gallo, bolsas y ojeras. Aunque no podemos evitar el envejecimiento, sí podemos adoptar rutinas que permitan retrasar estos síntomas manteniendo la juventud y vitalidad de la piel durante más tiempo. Hoy te explicaremos cómo lucir una mirada radiante.
La necesidad de cuidar el contorno de ojos
El contorno de los ojos está recubierto por una fina capa de piel que se encuentra expuesta constantemente a los movimientos del parpadeo y gestos faciales. Aunque la aparición de líneas y arrugas prematuras en esta zona puede estar determinada por genética, existen muchos condicionantes externos que también pueden influir en su aparición, tales como la nutrición, hidratación, descanso y adopción de pautas en el cuidado diario de la piel, entre otras.
En su primera fase, las arrugas e incipientes líneas de expresión pueden corregirse sobre la marcha aportando mayor hidratación y luminosidad a la piel para incrementar su firmeza y resistencia al repliegue y el hundimiento. En este punto, los productos enriquecidos con colágeno, ácido hialurónico y vitaminas pueden ayudar a contrarrestar los efectos del tiempo con eficacia.
Si durante esta fase no son tratadas, las arrugas y líneas de expresión se irán enfatizando dando origen a lesiones más profundas y al poco tiempo, las patas de gallo comenzarán a aparecer y las bolsas y ojeras serán cada vez más pronunciadas.
Cuidados adicionales para el contorno de los ojos
Existen cuidados adicionales que podemos utilizar para el contorno de los ojos e incorporarlos en nuestra rutina diaria muy fácilmente. Uno de los principales en este aspecto consistiría en la limpieza y desmaquillado diario, especialmente antes de dormir. Durante la noche es cuando se lleva a cabo la renovación celular y para que se produzca en condiciones óptimas, la piel debe respirar adecuadamente. Acostarse con restos de maquillaje es muy perjudicial para la piel y por ello aconsejamos utilizar productos desmaquillantes a diario que sean especialmente indicados para esa zona que por su delicadeza es mucho más susceptible a irritaciones.
Sí además del maquillaje convencional utilizas productos waterproof o resistentes al agua, deberás utilizar desmaquillantes especializados. Pues los desmaquillantes habituales para el maquillaje estándar no son capaces de eliminar los residuos de estos productos resistentes al agua impidiendo que las partículas depositadas en la superficie de la piel permitan que ésta respire adecuadamente.
Serum del contorno de los ojos, un producto esencial
Dentro de la extensa gama de productos destinados al cuidado de la piel, el serum para el contorno de ojos se postula como un básico indispensable en nuestro neceser de cosmética. Pues al igual que utilizamos productos específicos en esa zona de maquillaje, como por ejemplo, la prebase para sombras, de igual forma debemos utilizar un producto específicamente formulado para la delicada piel que recubre el contorno de los ojos, puesto que el grosor y el número de glándulas sebáceas en esa zona es diferente a otras áreas del rostro.
La elección del sérum adecuado para el contorno de ojos dependerá de las características individuales en cada caso. Pues en el mercado podemos encontraremos serums específicos para cada rango de edad que aportan propiedades adaptadas tanto a las pieles más jóvenes, basadas en la prevención, como a las más maduras para suavizar los signos de la edad.
Acorde con la clasificación expuesta en el apartado anterior, la efectividad de un producto se mide principalmente por la combinación de principios activos que permiten actuar sobre diferentes problemas al mismo tiempo, tales como la cafeína para activar la circulación y descongestionar bolsas y ojeras, como la vitamina C para neutralizar los radicales libres o los despigmentantes para proporcionar más brillo y claridad a la piel reduciendo la coloración habitual de las ojeras violáceas, marrón café e incluso negras suavizando también la pigmentación de cicatrices y manchas de la edad.
